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Define el Diccionario de Autoridades de la Real academia Española
(1737): el vocablo Palacio como “La Cafa en que hacen fu
refidencia los Reyes. Viene del Latine Palatium… es dicho qualquiera
donde el Rey ayunta paladinamente… Por extensión, fe toma por
qualquiera cafa funtuofa en que habitan personas”.
Antes, Sebastián de Covarrubias, en su libro Tesoro de la Lengua
Española (1611), definía como “Casa de Emperador o Rey. Este
nombre fue particular del Palacio de Roma, que estaba en el Monte
Palatino”. También añade, como lugar de encuentro. De allí viene que
antiguamente, en solariegas casas particulares, se llamaba Palacio a
una sala común. |
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Vista General del Palacio de Justicia. |
Hoy el vocablo se extiende a lugares destinados para las juntas de
corporaciones elevadas y según su destino, reciben los calificativos
de Palacio de Gobierno, Palacio Legislativo o Palacio de Justicia,
que son aquéllos en que suelen estar ubicadas las Audiencias y
Juzgados de la población. |
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El proyecto original para
la edificación del Palacio de Justicia del Perú, como hemos
señalado, fue diseñado por el Arquitecto Polaco Bruno Paprowscky. La belleza de sus líneas se mantiene hoy en la
fachada. Los espacios internos fueron reelaborados con la
participación de Paprowscky así como de la empresa Jueval Monge y
Cia. S.A., y como ingeniero superintendente estuvo José A. de Izcue. |
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Antes de Paprowscky, en 1925, al celebrarse el Centenario de la
creación de la Corte Suprema, el Presidente Augusto Bernardino Leguía delegó al prestigioso arquitecto francés Claudio Sahut el
diseño y reforma de varios de los ambientes de Palacio de Gobierno,
los que fueron concluidos por Ricardo Jaxa Malachowski. |
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La fachada principal es en forma de U, por los dos cuerpos avanzados
que la enmarcan. Ya no es el Palacio cerrado al pie de la vereda,
como los de España. Aparece con un espacio delantero de honor, al
igual que el local de Gobierno. |
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Se alza el Palacio sobre el suelo, con unas prolongadas escaleras,
cuyos pasos animan a seguir ascendiendo. No interrumpen el frontis,
por el contrario, armonizan con él, como telón de fondo, que es el
de la autoridad. |
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En el transitar de estas gradas nos encontramos con dos estatuas
felinas de leones, logradas en mármol macizo. Si bien en el diseño
original se las proyectó, sólo se hicieron las bases. Los leones se
encontraban desde 1898 en el llamado Paseo Nueve de Diciembre,
antiguo nombre de la elegante avenida de entonces. Fue por gestión
del Presidente de la Corte Superior, Don Domingo García Rada, quien
invocó al Alcalde de Lima, Luis Bedoya Reyes, su traslado desde el
Paseo Colón, hasta el Palacio de Justicia en 1968. el Alcalde Bedoya autorizó que los leones fueran llevados a su nuevo destino.
La empresa Migas fue la responsable del mantenimiento y del
acontecimiento. |
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Se afirma que dichas piezas fueron traídas originalmente a Lima con
la venida del ingeniero Almendráis y que fueron ubicados en un
inmueble en Chorrillos, al interior del patio de la finca ocupada
por Don Juan Revoredo, quien gestionó su traslado al Paseo Colón a
fines del siglo XIX. |
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Se menciona también que eran doce los leones existentes y que
fueron desapareciendo. El número doce es importante en la escalinata
que ascendía al Trono del Rey Salomón, famoso por su equidad y
sabiduría: en su espacio, había doce leones de oro. En la visión de
Ezequiel, se simboliza la equidad a Dios, Juez Supremo. “Está echado
como leona”, leemos en Deuteronomio, 33, 20. |
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En los emblemas de Alciato la verdad de la Justicia se manifiesta
cuando Marco Antonio vence a los que son poderosos por naturaleza,
como los leones. San Jerónimo afirmaba:”Cristo es un buen león para
los buenos y terrible para los malos”. |
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En cuanto a la fachada en sí, sigue un ordenamiento clásico: gran
pórtico de entrada, con el marco de un conjunto de esbeltas columnas
estriadas, todas exentas y pilastras adosadas al muro. |
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El entablamento está compuesta por un frontón triangular, con
cornisas y frisos más arquitrabe. El friso se decora con triglifos
(estrías verticales que recuerdan las antiguas cabezas de las vigas
de madera) y por metopas, originalmente espacios lisos
correspondientes al antiguo vació entre viga y viga y que aparecen
aquí con rosetones. |
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Perspectiva de la fachada lateral con balcón
abierto |
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Las cuatro fachadas del edificio están logradas en los estilos más
clásicos. Hay expresiones del orden dórico en sus grandes columnas y
una feliz aceptación o reelaboración del orden corinto, toda una
concepción externa e interna de armonía con la belleza. El sentido
de la vista y, por qué no decirlo, el del tacto se muestran en esta
obra, amplia y grandiosa, elevada con majestad. |
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Adornando la parte centrar del edificio, encontramos un conjunto de
grifos, monstruos con cabeza y alas de águila y cuerpo de león.
Proceden del mundo grecorromano y dentro del bestiario fantástico,
adquieren un carácter simbólico: el león y el águila en el mundo
medieval representaron las dos naturalezas de Cristo, la humana
(león) y la divina (águila), que tiene también el sentido de
guardianes, dada la agudeza visual del águila y la fuerza del león
y, por lo tanto, no es extraño encontrarlos en los capiteles de
ventanas y puertas. Son estas figuras, convertidas en escultura,
las que están ubicadas dentro de un mensaje iconológico, en la
representación de la justicia. Una expresión de ideal espiritual. |
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Las tres puertas que dan acceso al Palacio, una central, de mayor
dimensión, y dos laterales, que son en bronce y de construcción
esmerada y realizadas por la fábrica belga Reve Tochebus, la misma
que realizó las puertas del Palacio de Justicia de Bruselas y del
Palacio de la Haya en Holanda. |
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Las
puertas son de dos hojas con una pátina color bronce medalla. Luce
paneles decorativos con rosetones del mismo material. El responsable
de la importación fue la empresa de Anselmo Montanari y las
puertas fueron colocadas por la firma española de Juan Gonzáles A. |
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Ya en el
interior, el primer espacio que nos recibe es el hall principal,
llamado Salón de los Pasos Perdidos, que analizamos más adelante, y
hoy Salón Vidaurre. |
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Se destaca
su pavimento, constituido por elementos de mármol, cortados en forma
geométrica, que dan lugar a una lisa superficie, satisfactoriamente
lograda. |
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Salón de los Pasos Perdidos ó llamado también
Salón Vidaurre. |
Aquí están las bases para el proyecto de la torre, con estatuas en
los vértices, la cúpula, y una alta mampara que cubriría el espacio,
de proporciones monumentales, y que por razones de presupuesto no se
llegaron a concretar, pese a los avances de la obra. El proyecto,
desde su ubicación en el remate de la bóveda que cubre este Salón de
ingreso, con una altura de 65 metros, sobre el nivel del suelo del
paso de la República, sería hecha de concreto armado, con refuerzos
de acero, calculada para eventos sísmicos. Para esto se debía seguir
las indicaciones de la American Society of Civil Engineering, que se
contempla en el Estado de California. |
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Tema de interés, por otro lado,
es referirnos a los importantes vitrales que adornan este Palacio.
Los hay en varios ambientes pero, sin duda, los que están ubicados
al ingreso son los que revisten mayor interés. Se trata de la farola
mencionada, y los dedicados a la Justicia y a la Patria. |
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Es oportuno anotar que por esos tiempos, alcanzó gran desarrollo la
industria del vitraux, coincidiendo con el avance de la construcción
de edificios públicos. Allí están los imponentes vitrales en Palacio
de Gobierno y en el Palacio Legislativo. |
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Destacaban varias empresas en esta industria, como la de Cino
Hermanos, así como la del arquitecto Anselmo Montanari, florentino,
que ofreció ejecutarlos también en Italia, y la antigua vidriería
Santa Apolonia, que es a la que se le encomendó la fabricación de
estos vitrales y de los ya desaparecidos, que existían en el Salón
de Té, todos logrados en vidrio antik y catedral, pintados y
sombreados, quemados al fuego con plomo especial de estaño,
reforzados y masillados por ambas caras y con refuerzos de fierro.
En años posteriores, dado el deterioro de los vitrales se encargó la
refacción de los mismos a la vidriería de Cino Hermanos. |
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Proyecto original para la construcción del
Palacio de Justicia por el Arq. Polaco Bruno Paprowscky. |
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Originalmente la representación plástica de la justicia, era con
dioses varones, como la del Dios - Juez sentado en un trono. El
vocablo griego Diké significa justicia y viene de la poesía griega
como una diosa bajo el trono de Zeus, su progenitor, pesando en una
balanza las acciones tanto de los dioses como de los hombres. Tiempo
más tarde la justicia estaría personificada en la diosa Themis, una
de las esposas de Zeus. |
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Con el cristianismo, vendría la representación del Juicio Final, el
Cristo - Juez con San Miguel Arcángel dedicado al pesaje de las almas.
Durante la Edad Moderna la sintaxis iconológica de la Justicia
adquirirá forma, tal cual se le representa en el vitral de Palacio.
Aparece sentada delante del espectador, como una imagen estática y
de aspecto grave, con una espada desenvainada en su mano derecha,
dirigida hacia la tierra, mientras que con la izquierda sostiene una
balanza de doble platillo (bilanx romana) para sobrepasar las
acciones humanas.
Otro vitral que representa también la justicia, aparece de pie, pero
aquí se adiciona un libro que, sin duda, son alusiones icónicas a la
Ley de la justicia. Viste de blanco, porque el juez debe ser hombre
sin mancha.
Las imágenes de la justicia tiene un carácter religioso,
propagandístico, didáctico y moralizante. Fue un asunto encarado
por intelectuales y humanistas, para tratar la moral y la ética.
Recordemos que la justicia es una de las siete virtudes, y por otro
lado en las Bienaventuranzas, leemos, “Bienaventurados los que
tienen hambre y sed de justicia”.
En cuanto a la iconografía de la Patria, ésta debe ser interpretada
no en forma aislada, sino dentro del corpus de los emblemas patrios,
que se originan en 1820 cuando un 21 de octubre en Pisco por decreto
de Don José de San Martín se adopta La Bandera Nacional. |
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“Renació el Sol del Perú” reza el primer escudo del Perú, obra del
artista Francisco Javier Cortez y es a él a quien se le debe la
plasmación de todos los emblemas patrios de aquel entonces, hasta
1825, entre los cuales muchos fueron reelaborados por el grabador
José Cabello, al momento de acuñar monedas y medallas. |
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Prima en la mayoría de ellos el gusto por la naturaleza. Cortez por
excelencia era dibujante botánico y tenía a su cargo la cátedra de
dibujo en el Colegio de San Fernando al que, por otro lado, asistían
intelectuales y naturalistas.
El vitral que comentamos nos presenta a la Patria con el
Escudo
Nacional rodeada de ejemplos de riqueza natural, lectura que puede
ser doble, por un lado, la riqueza mineral, como se suele anotar, y
por otro, el desarrollo económico. |
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La pinacoteca del
Palacio está básicamente formada por los retratos
de los magistrados, retratados con frac y pechera blanca y
condecoraciones hasta 1973, año en que se dispuso que debían ser
retratados con traje de saco y corbata. |
La Dama de la Justicia. |
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Los retratos y las mascarillas fúnebres son la búsqueda de la
fidelidad del rostro y de la permanencia para los descendientes. El
formato de tres cuerpos, en que han sido logrados, permiten al
observador captar mejor la diferencia entre lo biológico y lo
psicológico, que no se llega a lograr en un busto. Muchos retratos
han sido hechos en vida del modelo, por no decir la mayoría. Aquí el
artista representa una personificación ética, vale decir, un retrato
natural. |
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Aquí queremos referirnos a la heráldica cívica de la justicia.
Llevan los magistrados, como se ilustran en estas páginas, una cinta
con la Medalla de la Justicia. Adornaban su informe de gala con
bastón y birrete. |
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Existe también - establecida por Decreto Ley Nº 18920, de agosto de
1971 - la Orden Peruana de la Justicia, una valiosa condecoración
cuyos grados son los siguientes: Gran Cruz, Gran oficial,
Comendador, Oficial y Caballero; según los servicios excepcionales y
calificados prestados en el Poder Judicial. Las insignias y
símbolos, según el caso, serán de oro, de plata dorada, de plata
enchapada y esmaltadas. Irán los símbolos de la Balanza, la Espada
de la Justicia y un Libro abierto esmaltado en blanco, con las
letras JVS en negro. Se completa la condecoración de la Gran Cruz
con una banda de moire de color blanco y en su parte central una faja
roja vertical, que es llevada en forma transversal sobre el hombro
derecho, la que termina en un lazo sobre la que se coloca una
escarapela de la misma tela. Según el grado, se dan variantes, como
el protocolo de su uso en ceremonias oficiales. |
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Pero, sin lugar a dudas, la pintura que más destaca sobre la
justicia es la del ilustre pintor tacneño Francisco Laso, quien
presenta una figura erguida y de mayestática serenidad, acorde con
la majestad de la ley. Trajeado a la manera clásica, con una amplia
toga plegada al gusto romano. |
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Es oportuno anotar aquí que este lienzo estaba ubicado originalmente
en el despacho del Ministro de Justicia y Culto y que, por la
supresión de dicho Ministerio a fines de 1968, pasó a su ubicación
actual. |
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En este espacio, Joya de la Justicia donde su arquitecto ha sabido
aprovechar la oportunidad como Proyectista y Decorador del mismo.
Hoy en día es raro que los modernos edificios públicos que albergan
autoridades puedan proporcionarnos el goce de la belleza y del
estilo plasmados, con un carácter particular, propio de las
instituciones gubernamentales. |
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Galería de
Fotos >> |
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