El nuevo sistema de justicia implica una configuración del proceso penal según la Constitución
Política del Estado, acorde con los principios y derechos de protección a la persona. Por lo que ya
“No hay Culpa sin Juicio”, y “No hay Juicio sin Acusación”.
La persona tiene derecho a:
- Ser juzgado por un Juez Imparcial
- Ser Juzgado dentro de un plazo razonable
- A un juicio oral publico y contradictorio
- El principio de igualdad entre las partes
- La presunción de inocencia
- Al Derecho de defensa